jueves, 29 de octubre de 2009

Huyo de mi propia luz



Huyo de mi propia luz
porque mi propia luz
no es la luz del hombre.

Soy entre nosotros
el que desata
los nudos más lejanos.

La soledad
más que un hábito
es una condición
de la belleza.

De su libro: "La poesía y yo"
Miguel Oscar Menassa

miércoles, 28 de octubre de 2009

lunes, 26 de octubre de 2009

viernes, 23 de octubre de 2009

Las 2001 noches

Noche 105

Hablar de mi locura no ha de ser una clase magistral, porque ninguna locura es magistral, es decir, ninguna locura puede dejar ninguna enseñanza.
Estoy solo, como los hombres desesperados, como los hombres hambrientos. Tengo confusión mental y nada me consuela. Todo ocurre dentro de mí. El resto, la realidad, mis seres queridos en la realidad, eso no ocurre u ocurre mal.
Ambicionar, ambiciono todo el tiempo para mis deseos amorosos, para mi veleidad de escribir.
Mis deseos abiertos como perlas dentro de otras perlas abiertas.
Todas abiertas para mí. Para mí, el sol, las nubes del verano, el helado murmullo de tu voz agonizando en los plenos inviernos.

Miguel Oscar Menassa

miércoles, 21 de octubre de 2009

LA LLUVIA

           

 

Bruscamente la tarde se ha aclarado

Porque ya cae la lluvia minuciosa.

Cae y cayó. La lluvia es una cosa

Que sin duda sucede en el pasado.

 

Quien la oye caer ha recobrado

El tiempo en que la suerte venturosa

Le reveló una flor llamada rosa

Y el curioso color del colorado.

 

Esta lluvia que ciega los cristales

Alegrará en perdidos arrabales

Las negras uvas de una parra en cierto

 

Patio que ya no existe. La mojada

Tarde me trae la voz, la voz deseada,

De mi padre que vuelve y que no ha muerto.

 

 

Jorge Luis Borges

 
 

Nota de la redacción: ,Para alguno de nosotros, es indisoluble la asociación de este poema, con la voz de Tom Lupo.

Gracias Tom.

 

enviado por  Alejandra  Madormo


Ingresá a tu Hotmail desde tu Messenger. ¡Windows Live hace tu vida más simple!

El dolor


Los mejores discursos sobre el dolor fueron producidos por los poetas, los filósofos, los pintores y los historiadores que supieron asegurarle un estatuto teórico, social, médico y subjetivo.
Desde la descripción homérica de la tristeza hasta la teorización de Aristóteles acerca del genio melancólico, pasando por el relato mítico de Hipócrates, esta forma de lamentación perpetua, siempre fue la expresión de la rebelión del pesamiento y también la manifestación más extrema de un deseo de autoaniquilación ligado a la pérdida de un ideal.
De allí que se pueda vislumbrar una transferencia permanente entre el dominio de la enfermedad y el del espíritu.
El dolor, experiencia de carácter desagradable que se convierte en sufrimiento, puede alojarse en el cuerpo cuando el sujeto no conoce otra manera de hablar de él.
Toda su vida gira en torno a su dolor en una relación autoerótica, en la que éste sería el autocastigo con el que se aísla del resto del mundo.
En el dolor físico, nace una elevada carga narcisista del lugar dolorido del cuerpo, carga que aumenta cada vez más y vacía al yo.

Del libro: "Medicina Psicoanalítica I"
Norma Menassa e Inés Barrio

INVITACION A LAS 2001 NOCHES

"Si es posible el poema es posible la vida"

                                                                  MIGUEL O. MENASSA
 
             LAS 2001 NOCHES
                                  Ciclo Poético - Musical
                                       en LA FORJA
                               Café Cultural
              Bacacay 2414 Ciudad Autónoma de Buenos Aires 
  
                      Coordinan los poetas y psicoanalistas:
 
                      LUCIA SERRANO y JORGE MONTIRONI
 
         Te esperamos el domingo
      25 de Octubre a las 18 hs.
 
      Presentaremos la revista virtual de 
            Poesía, Aforismos y Frescores:
                  LAS 2001 NOCHES
 
                       Dirigida por el Dr. Miguel O. Menassa 
 
             MICRÓFONO ABIERTO 
 
                           
                INFORMES: Tel./fax: 4749-6127 y 4903-7853 
 



Ingresá a tu Hotmail desde tu Messenger. ¡Windows Live hace tu vida más simple!

lunes, 19 de octubre de 2009

Óleo sobre lienzo, Miguel Oscar Menassa


"El aullido" (1996)

UNA NOCHE MAS

NOCHE 565 -
                   de "Las 2001 Noches"
 
 
Oh, noche embrujada de camelias sangrientas,
nadie sabrá de tí,
nadie sabrá de tí salvo esta melodía.
Pobre paloma que ya no sabe volar.
Alas entumecidas por el tiempo y tus ojos cegados por la falta de amor.
Paloma, pequeña paloma de la paz,
tu funeral será espléndido, te cubriremos todo el rostro de flores, para que nadie vea en tu rostro el rostro de la guerra.
                                   Miguel Oscar Menassa
 
 

jueves, 15 de octubre de 2009

Poesía y Psicoanálisis


"Poesía y Psicoanálisis, una renovada perplejidad ante lo irracional.
Una vara de mimbre quebrada por un viento que no fue. Un parece
que te encuentro, pero nada.
El primer resultado, por lo menos para Heidegger, fue que el reino
de acción de la poesía debe ser concebida por la esencia del lenguaje.
Por lo tanto, la esencia de la poesía debe ser concebida por la esencia
del lenguaje. Pero en segundo lugar, nos dice Heidegger, se puso en
claro que la poesía, el nombrar que instaura el ser y la esencia de las
cosas, no es un decir caprichoso, sino aquél por el que se hace
público todo cuanto después hablamos y tratamos en el
lenguaje cotidiano.
Por lo tanto la poesía no toma el lenguaje como un material ya
existente, sino que la poesía misma hace posible el lenguaje. La
poesía es el lenguaje primitivo de un pueblo histórico. Al contrario,
entonces, es preciso entender la esencia del lenguaje por la esencia
de la poesía.
El fundamento de la existencia humana es el diálogo con el propio
acontecer con el lenguaje (el inconsciente está estructurado como
lenguaje) pero el lenguaje primordial es la poesía como instauración
del ser. Algo que solo será luego, determina cómo tuvo que ser antes."

De su libro: "Freud y Lacan -hablados 2-"
Miguel Oscar Menassa

miércoles, 14 de octubre de 2009

Penumbras

La mañana se perfora
por la simple espesura
que va de la puerta al infinito,
exhumando el sol.

¿Qué altura tiene el miedo
cuando amanece otro miércoles de abril
y todo está en penumbras?

No se trata de seguir con esto,
pero
la penumbra del cuarto
la penumbra de la calle
las nubes cayendo
la ausencia de lluvia,
y la altura del miedo se mide en la noche,
se trata de seguir...

Hay un volcán en mi memoria
cálido y humeante,
pero en la penumbra
son cavernas estériles todos los recuerdos.

El porvenir se lame
la espalda con lentiutud
y me empuja a un prólogo más,
¿de qué cópula ha nacido esta amenaza?

Esa es la tiniebla de los días,
una exigua sombra de muerte,
un panal de pesadillas inciertas
imaginando la soledad del cielo.

Un prólogo más.
digo en silencio para escucharme,
un coágulo de tiempo,
un rubí fulgurante para guiar el éxodo nocturno.
Y sin vacilar, nos abrazamos
cómplices de esta travesía.
Los anillos que no tenemos
ciñen nuestras manos
hasta la caricia siguiente
hasta el abrazo siguiente
que espera detrás de todas las puertas
que van del miedo
al infinito,
como un largo
trayecto de anhelos y
presagios
que no desisten.

Del libro: "Así es la rosa"
Marcela Villavella

viernes, 9 de octubre de 2009


Fin de semana


Hay sentimientos contagiosos, risas interminables, dolores
terribles, dolores al corazón.
Tu rostro ha pasado una sola vez por mi corazón y se ha
manchado para siempre de sangre, de pura sangre roja, al pedo,
porque de cualquier otro color es lo mismo.
Y esa piel deliciosa, esa piel contagiosa como una enfermedad;
como para volverse loco, muchacha, con tu piel; tu piel de
almendras (para decir una fruta desconocida) tu piel de
almendras almendradas y nada más por hoy, cerrar los ojos y
repetir todo esto de nuevo.
Sexos iluminados por tu piel arrasan con todo lo posible, me
arrasan, hacen volcar mi corazón. Basta por hoy, este cerrar y
abrir de ojos puede enloquecernos, una locura demasiado
seria como para ganar dinero (una pequeña fortuna a orillas
del mar) como para poder cerrar los ojos para siempre a
orillas del mar.
Pechos enormes flotan deseperadamente como barcos.

De su libro: "22 poemas y la máquina electrónica o cómo
despertar a los ejecutivos"

Miguel Oscar Menassa







jueves, 8 de octubre de 2009

No detiene los pasos el camino




No detiene los pasos el camino
ni la esperada aurora las visiones.

Avanzan con suavidad felina las melodiosas notas
de cobre de hojas tratadas como ruinas,
frágiles por el viento, húmedas por la luna.

No puede el nervio fino alterar las pasiones
dejar quieta las aguas de algún abismo íntimo
acallar los rumores suspendidos de hechizos
la sordidez, el odio, lo oscuro de mí mismo.

No quiere la fuerza contenida de un latido profundo
demorar las salidas de los pulsos certeros,
de relámpagos fijos, de ráfagas de vértigos
que sobresaltan alas que dominan los sueños,
infinitos suspiros en donde el aire escribe
el silencio de un mundo.

No es esta vez la hora del frescor de lo verde
de lo puro imposible dando quietud al alma
de la límpida línea que embellece la mano
y hace al gesto mirada misteriosa y rasgada.

Tal vez ésta es la hora del desvelo nocturno,
del resplandor de plata arrojado al vacío
astillado en el riesgo, desgranado en palabras,
finas hebras de olvido.

Del libro: "Cuando está por llover los pájaros no vuelan"
Norma Menassa

miércoles, 7 de octubre de 2009

Huellas perdidas

Nadie espera lo que no suele suceder,
ni la vida ni la muerte ni este amor
que a veces se asemeja a una cicatriz
de oscuridad en plena tarde.

Cómo saber del error
si el frío se engendra solo,
sin astucia sin pensamiento sin padres.

Del rayo que no avisa y cae
es culpable el cielo
aunque la noche
nos encuentre entre disculpas.

Sólo resta acompañarse
como el aliento a las manos del invierno
fundar acantilados para el tiempo,
y deslizarse
entre las huellas perdidas de lo que fue.

Del libro: "Peldaños"
Renata Passolini

martes, 6 de octubre de 2009

Lo inacabable de Alfonsina Storni


No tienes tú la culpa si en tus manos
mi amor se deshojó como una rosa:
Vendrá la primavera y habrá flores...
el tronco seco dará nuevas hojas.

Las lágrimas vertidas se harán perlas
de un collar nuevo; romperá la sombra
un sol precioso que dará a las venas
la savia fresca, loca y bullidora.

Tú seguirás tu ruta; yo la mía
y ambos, libertos, como mariposas
perderemos el polen de las alas
y hallaremos más polen en la flora.

Las palabras se secan como ríos
y los besos se secan como rosas,
pero por cada muerte siete vidas
buscan los labios demandando aurora.

Mas... ¿lo que fue? ¡Jamás se recupera!¡
Y toda primavera que se esboza
es un cadáver más que adquiere vida
y es un capullo más que se deshoja!

lunes, 5 de octubre de 2009

Cuando vengan por mí

Cuando vengan por mí
me estaré yendo
de los olores familiares,
del tomillo,
el laurel y los jazmines.
Me habré ido a sostener
conversaciones
con locos desquiciados,
cuando vengan por mí.
Será tarde o temprano.
Violentarán la puerta
de mi casa
porque no alcanzarán a comprender
que haya quedado de par en par,
abierta.
Requisarán los libros,
las cartas, los poemas
buscando una señal
de la derrota,
cuando vengan por mí.
Algún improvisado
ocasional vecino
dirá que hacía minutos
se escuchaba mi voz,
cantando un tango,
tu voz
acariciando versos de Carilda,
mi voz diciendo te amo,
minutos nada más,
pero me estaré yendo.
Los rescoldos ardiendo todavía
algún desorden
de manzanas verdes
de cáscaras y huesos en los platos,
una canilla sin cerrar
y las sábanas tibias
y otra vez ese olor...
ese olor impecable a buenos tratos
que solíamos darnos, por las tardes.

Cuando vengan por mí
y desatiendan todo cuanto amé
y profanen
lo que mi vida tuvo de sagrado.
Cuando vengan por mí
los indecentes
a proponerme pactos
con lo eterno,
habrán de distrarse
con los versos,
se hará de noche y
deberán volver
al día siguiente.

Del libro: "Claveles españoles"
Inés Barrio

Óleo sobre lienzo, Miguel Oscar Menassa


Cuando está por llover -1994-